The Soumaya Museum

Uno de los museos más modernos que hay en la Ciudad cuenta con una oferta artística inigualable…

De color plateado brillante y formado por miles de hexágonos, el museo Soumaya se asemeja a un palacio de duendes, encuadrado de manera surrealista por una de las zonas más urbanizadas de Polanco. A pesar de estar entre oficinas, edificios administrativos, centros comerciales y el recién creado Museo Jumex, es fácil de encontrar.

Este espacio es parte del proyecto cultural organizado por Carlos Slim. Inició en 1994 como un museo en el interior de un centro comercial, pero la ambición de la idea se consumó con el edificio creado por su propio cuñado, Fernando Romero, en 2011. El museo se llama así como un homenaje a la fallecida esposa de Slim, Soumaya Domit.

Las obras son un recorrido histórico por la historia del arte desde el siglo XV; y hay críticos que apuntan que, en el museo verdaderamente se encuentran puntos nodales esenciales del arte a través del tiempo. Por dentro, el museo se asemeja al Guggenheim de Nueva York, con una forma de espiral en dimensiones más holgadas. Además uno de sus grandes atractivos es que guarda la segunda colección más grande del mundo del escultor francés Auguste Rodin. También hay obras de artistas icónicos como Picasso, Dalí, Siqueiros, Tamayo o Rivera, y arte novohispano y latinoamericano.

El museo da la impresión de una ambiciosa probada del arte pero también se busca que las personas, muchas de pocos recursos, tengan un acercamiento a piezas históricas que jamás podrían haber visto fuera de México. Se ha criticado la falta de sensibilidad curatorial en la selección de las piezas, como si se tratara de ocurrencias más que de un conocimiento sobre la lógica museística y de colección.

Lo cierto es que es un espacio que acerca a los grandes exponentes del arte al público. Quizá pudo alcanzarse lo anterior bajo una visión sofisticada, pero lo indudable es que es un proyecto imaginado para otorgar al público más amplio una pincelada de arte y, de hecho, quizá el surrealismo de su edificio vuelve más atractivo al recinto para espectadores más eclécticos.

Fotos de MXCity